En las personas con FQ (pFQ) las alteraciones del metabolismo hidrocarbonado, siendo su máxima expresión la diabetes relacionada con la FQ (DRFQ), son las complicaciones no pulmonares más frecuentes.

En las personas con FQ (pFQ) las alteraciones del metabolismo hidrocarbonado, siendo su máxima expresión la diabetes relacionada con la FQ (DRFQ), son las complicaciones no pulmonares más frecuentes.
La alimentación es un pilar esencial en el manejo tanto de la diabetes tipo 1 (DM1) como de la diabetes tipo 2 (DM2).
En la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UCIP), los pacientes con diabetes mellitus tipo 1 (DM1) ingresan principalmente por cetoacidosis diabética (CAD) al debut de la enfermedad o en descompensaciones de la misma, siendo esta la principal causa de hospitalización y mortalidad en niños con este trastorno metabólico.
La diabulimia es un término que se utiliza para describir un trastorno alimentario y de la imagen corporal que afecta exclusivamente a personas con diabetes tipo 1, donde la persona manipula (omitiendo o restringiendo) la insulina para manejar su peso y/o imagen corporal, lo que a su vez suele llevar a episodios frecuentes de hiperglucemia mantenida, e incluso desencadenar en una cetoacidosis diabética.
Los sensores de glucosa y sistemas de infusión de insulina son dispositivos que permiten medir los niveles de glucosa y administrar la insulina de manera continua y dinámica, disminuyendo así la incidencia de hipoglucemias y mejorando la calidad de vida y control de la enfermedad en personas con diabetes mellitus.
El sueño es esencial para la salud y el bienestar general, ya que influye en una amplia variedad de procesos fisiológicos y cognitivos.
El aumento de la prevalencia de diabetes, en particular de la diabetes mellitus tipo 2 (DM2) es alarmante.
Las personas con diabetes mellitus y tras un mal control de su enfermedad, pueden padecer complicaciones crónicas.
La prediabetes se define como un estado de disglicemia asintomática, caracterizada por niveles de glucosa en sangre superiores a los valores normales, pero no lo suficientemente elevados como para ser considerados diabetes mellitus tipo 2 (DM2).
El desarrollo de nuevas tecnologías ha supuesto un importante avance en el tratamiento de la diabetes, mejorando tanto el control como la calidad de vida del paciente.